La conflictividad en Autoneum A Rúa sigue creciendo. Tras dos jornadas de paros parciales con un seguimiento mayoritario, la plantilla ha dado un paso más: dos días de paro total que mantienen la producción prácticamente detenida. Lo explica Óscar Gil, presidente del Comité de Empresa, que denuncia una situación inédita: «Non temos contestación da empresa desde faire días… oficialmente non hai nada».
Gil relata que este martes a mediodía volvieron a concentrarse delante de las instalaciones para denunciar una parálisis que atribuyen al cierre absoluto de la dirección: «Non se han sentado en ningún momento, nin nos din nada». Según afirma, el comité lleva días esperando una llamada que no llega.
El presidente del comité recuerda que, pese a contar con uno de los convenios «máis precarios», siempre habían logrado acuerdos «fora de convenio» para mejorar condiciones. Incluso cuando el convenio quedó caducado, se alcanzaron compromisos puntuales. Esta vez, sin embargo, asegura que la empresa ha marcado una línea roja: «Dixaron que podían negociar outras cousas, pero salarialmente non».
El desencadenante, explica, llegó tras el incendio de este verano. Muchos trabajadores tuvieron que desplazarse a otras plantas, especialmente a Valldoreix, en Barcelona, donde comprobaron condiciones laborales muy diferentes: «Menos traballo e salarios un 30 ou un 40% máis grandes». Ese contraste —apunta— reforzó la demanda de una revisión salarial.
Una propuesta abierta a negociación… que nadie contesta
Preguntado por la subida planteada, Gil detalla que presentaron un porcentaje de máximos de «entre un 15 e un 20», distribuido en varios años y con plena disposición a negociar la fórmula: «Estamos dispostos a negociar todas as cousas. Sempre foi así». En el pasado, recuerda, llegaron a acuerdos similares, como uno del 20% repartido en seis años.
Pero insiste en que el conflicto actual no gira solo en torno a las cifras: lo que más indigna a los trabajadores es la ausencia de diálogo. «O peor de todo é a falta de negociación… é como se non existíramos».
La situación en fábrica es ahora de parálisis casi total. Según el comité, la producción está detenida en un 90%, manteniéndose únicamente algunos puestos cubiertos por personal eventual o de ETT: «Habrá dez persoas, o mellor».
A esto se suma el malestar por el esfuerzo realizado tras el incendio del verano: «Aquí traballou xe todos os días… parece como que sí, que din xe “que bueno eres”, pero ao final non os valoran». La sensación, explica Gil, es de falta de reconocimiento hacia quienes mantuvieron la planta en funcionamiento en circunstancias extremas.
Nuevos paros en el calendario
Las acciones no se detienen. Tras los paros de hoy martes y mañana miércoles 10 de diciembre, el comité ya tiene marcadas nuevas fechas: 18, 19 y 22, además de concentraciones diarias frente a la empresa durante los cambios de turno y piquetes informativos para los camiones. Gil subraya que seguirán movilizándose mientras no haya avances: «Estamos aquí na empresa esperando… pero non sabemos nada»
