Nadie está preparado para perder un hijo. Es una situación antinatural pero que, por desgracia, sucede. Cuando el fallecimiento se produce en el útero de la madre o en el primer mes de vida, se considera muerte perinatal. Un suceso que se da en 1 de cada 4 embarazos y que todavía está invisibilizado.
De ahí que este fin de semana O Barco haya acogido unas jornadas sobre ese duelo invisible que sufren muchos padres. Es el caso de María Conde y José de Jaime, que perdían a su hija en la semana 40 de embarazo. María tuvo que dar a luz a la pequeña Clara, que había muerto en el útero. Un suceso traumático para estos padres que, como ellos mismos explicaban, aprendiendo a encarar de la mano de una psicólogo que les ayudó a afrontar ese proceso.
El papel de la terapia es básica en este tipo de procesos. Es por ello que las jornadas han contado con la presencia de Jesica Rodriguez, psicóloga especializada en perinatal, que ha puesto sobre la mesa los diferentes puntos a tener en cuenta ante un momento trágico como este. Y es que nadie prepara a los padres para un final así. El parto es un momento que solemos relacionar como la felicidad plena y en este caso acaba en shock y aturdimiento.
El duelo se considera silenciado por múltiples razones. Entre ellas, al falta de un reconocimiento jurídico del bebé, ya que no se incluye en los libros de familia. Por otro, que la familia y entorno no suele conocerlo.
Sin duda el papel del entorno es básico para afrontar el duelo, ya que no debemos minimizar el dolor. Pero también el de los sanitarios durante el paso de los padres pro el hospital. Es importante informar correctamente a los padres y darles tiempo para que asimilen y tomen las decisiones oportunas, como si quieren o no conocer al bebé.
Sobre todo ello han versado este fin de semana las jornadas que llegaban a O Barco de la mano de la Asociación de Nai a Nai
