Las constantes precipitaciones caídas entre la noche y la mañana del 31 de diciembre provocaron incidencias en uno de los accesos a O Barco.
En concreto el paso subterráneo que comunica O Barco y Veigamuíños tuvo que cortarse a media mañana debido a las acumulaciones de agua. Para resolver el problema acudieron hasta el lugar la Policía Local de O Barco y los GES (Grupo de Emergencias Supramunicipal) de O Barco.
Los conductores afectados tuvieron que desviarse por la Rúa Río Miño -que lleva a la estación de autobuses- o por la Avenida Eulogio Fernández en el caso de los conductores que circulaban por el casco urbano. Los conductores llegados desde la N-120 o Veigamuíños se vieron obligados a desviarse por la Rúa da Rampa accediendo al casco urbano por el paso subterráneo de la Rúa Caleras.
A las 13:15 horas el tráfico quedó restablecido.