Aprobó con los votos en contra de la oposición una dedicación parcial para el alcalde y otra absoluta para Joana Goméz
La Corporación de A Rúa celebró el pleno de organización municipal, el primero de la legislatura y del actual alcalde, el «popular», Álvaro Fernández. Los puntos del orden del día fueron prácticamente de trámite hasta que llegó el séptimo alusivo a las retribuciones, sobre el que hubo debate, polémica y que prosperó con los votos en contra de la oposición.
El alcalde, amparado por un informe de Secretaría e Intervención, sometió a aprobación de los ediles la retribución de una dedicación parcial, la suya, de 23,5 horas, y otra exclusiva, en este caso para la concejala Joana Gómez. Detalló que ambas suman la partida consignada en el presupuesto municipal —prorrogado desde 2017—.
Así, citó que su dedicación parcial tendrá un coste de 24.192 euros anuales, a los que hay que sumar 7.632 euros de la Seguridad Social. En total, 31.834 euros. En cuanto a la dedicación exclusiva, el montante asciende a 16.800 euros anuales más 5.340 euros de Seguridad Social que suman 22.140 euros.
La portavoz del BNG, María González Albert, calificó de «sorpresa» la asignación de las retribuciones, porque el alcalde habló hace unos días de su preocupación por la deuda municipal y su primera propuesta se traduce en gasto para las arcas municipales. «Toda a partida presupostaria dun ano a gastan nos cinco meses que quedan para acabar o ano», expuso.
Además, Albert tildó de «abuso» la retribución a la dedicación parcial del alcalde pues «todos os alcaldes cobramos o mesmo e o líquido desta adicación parcial vai ser algo menos de 90 euros con respecto aos anteriores alcaldes», haciendo alusión a que toma el techo salarial. Recordó que si la partida del presupuesto está intacta es porque el ex alcalde Luis Fernádez Gudiña, no cobró sueldo.
Por su parte, el socialista Luis Fernández Gudiña, rechazó las dos dedicaciones por «coherencia, xa que estando nos no goberno quitamos unha de dúas», expresó, y también porque considera que incrementa el gasto del Concello. «Falan de deuda e agora incrementan o gasto», apostilló.
Por su parte, el portavoz del RUA, José Vicente Solarat, calificó las retribuciones de «tema resbaladizo» y aclaró que un alcalde con dedicación exclusiva no significa que se dedique exclusivamente a ello, sino que «o único que limita é a percibir salarios doutras administracións».
Solarat hizo un reconocimiento público al ex regidor Fernández Gudiña porque, «ainda que nunca o fixo público, non percibiu soldo do Concello» y apuntó que las retribuciones de las dedicaciones non tienen efecto retroactivo. «Haberá que perfilar a partida para os próximos presupostos.
Álvaro Fernández señaló que su intención «non é subir o salario. A miña adicación é parcial, pero na práctica será total». Dijo que la dedicación exclusiva de Joana Gómez es muy necesaria y también se traduce en crear un puesto de trabajo —a lo que María Albert respondió con que a la política no se viene a tener un empleo aún cuando se remunere—. Además, indicó que si hubiese que rectificar la partida en el futuro, se rectificará.
«Vaise traballar todos os días sin horario», apuntó y citó que la situación es completamente legal, insistiendo en que «non consumimos mais diñeiro. Son dúas adicacións remuneradas ca partida presupostaria».
Así las cosas, la nueva Corporación de A Rúa se estrenó con polémica por los sueldos y en una sesión donde también se acordó la constitución de la junta de gobierno, comisiones y representaciones de los concejales en diversos organismos.