Este martes han dado comienzo los primeros exámenes de la ABAU con un total de 112 alumnos
La mayoría de los 112 alumnos de Valdeorras, Terras de Trives, Quiroga e Viana do Bolo que afrontan este martes, 7 de julio, la primera jornada de ABAU —Avaliación de Bacharelato para o Acceso á Universidade— llegaban a primera hora al IES Cosme López de A Rúa con cierta dosis de nerviosismo. Este año la sensación se incrementa por las mascarillas, las distancias de seguridad, los geles hidroalcohólicos y también por la falta de clase desde el mes de marzo, que ha complicado un poco la preparación de la materia.
El instituto ha habilitado cinco aulas para la realización de las pruebas, frente a las dos que se solían utilizar en años anteriores. «Tenemos comedor, el aula de taller eléctrico, salón de actos, cafetería y otro taller. Lo bueno es que hay tres puertas, por lo que los accesos han sido bastante fluidos», explicaba Mariángel González Santos, jefa de estudios del centro. A esto han ayudado miembros de Protección Civil de A Rúa que regularán los accesos y las salidas durante los tres días que dura la prueba.
Además, el número de alumnos ha permitido que cada centro se ubique en un aula, excepto Viana y Quiroga que están juntos. En concreto 77 estudiantes acuden de los centros de O Barco, 40 en total del IES Lauro Olmo y otros 34 del IES Martaguisela. Además, 19 lo hacen desde el IES Cosme López de A Rúa. Desde el IES Xermán Ancochea de Trives se desplazaran 19 estudiantes.
A las 9.00 horas han dado comienzo los primeros exámenes y minutos antes, a las puertas del centro, los nervios eran los principales protagonistas. Este año, todo es diferente. Cada alumno ha tenido que prepararse la materia por su cuenta, aunque siempre con la ayuda del profesor. «Costó un poco al principio, pero luego te acostumbras», nos contaba una alumna.
A esto, se suma la necesidad de acudir con mascarilla y las nuevas normas que el Covid.19 ha obligado a implantar. «Quedaros siempre en el mismo sitio, sin moveros. Recogeros el pelo y apagad el móvil», les ordenaba una profesora minutos antes de entregar el examen.
Una situación un tanto diferente a la de otros años pero que no ha truncado los sueños de ninguno de estos jóvenes que ya tienen claro que viene después de la ABAU. De este examen saldrán médicos, veterinarias, abogados, terapeutas, matemáticas....