
El sector de la pizarra en Galicia —motor económico clave en la comarca de Valdeorras— sigue enfrentando desafíos en 2024. Las exportaciones de pizarra registraron una caída significativa del 9,2% en los primeros seis meses del año.
En total, se exportaron 216.929 toneladas, frente a las 238.878 del mismo periodo en 2023. Una caída que ha llevado también a un descenso en la facturación, en concreto del 7,5%, situándose en 190 millones de euros, frente a los 205 millones del año anterior.
Esta bajada afectó principalmente a mercados clave como Francia, con una caída del 6%, Reino Unido, que experimentó un descenso del 15%, y Bélgica, donde la disminución alcanzó un 32%.
No obstante, EE.UU. y Alemania han reportado cifras positivas, con aumentos del 8% y 4,8% respectivamente, lo que ofrece un leve respiro al sector en el ámbito internacional. Desde el Clúster de la Pizarra explican que la inestabilidad global y la crisis en el sector de la construcción, sumada a la falta de colocadores capacitados, ha contribuido a este descenso.
Subida salarial de un 11%
A pesar de estos retos, los 2.400 trabajadores del sector han recibido una buena noticia en el ámbito laboral. El nuevo convenio firmado entre la Asociación Galega de Pizarristas (AGP) y UGT contempla una subida salarial del 11%, repartida en tres incrementos: un 4% para 2024, seguido de un 3,5% en 2025 y otro 3,5% en 2026. El acuerdo se firmó en la sede de la AGP en Candís, proporcionando mejoras salariales en un contexto de dificultades económicas.
Este pacto laboral fue celebrado por los trabajadores, aunque las centrales sindicales CC.OO. y CIG decidieron no adherirse al mismo. Mientras el sector enfrenta un panorama complejo, el acuerdo representa un avance para los empleados en términos de estabilidad laboral y mejoras salariales, ya que también hay cambios en el complemento de la incapacidad temporal.