Finalmente, la empresa Telefónica no será expedientada por el Concello de O Barco, así lo ha comunicado el alcalde, Alfredo García. A través del edil popular, Arsenio Moldes, llegaba al pleno ordinario de enero una queja de los vecinos de la calle Lamas Carvajal por el ruido intenso de unas instalaciones de esta empresa, que no les permitía incluso conciliar el sueño. Era entonces cuando se planteaba la posibilidad de abrir un expediente sancionador a la empresa, tras comprobar que efectivamente «los vecinos tenían razón» puesto que el registro obtenido superaba en de 7,9 decibelios los límites establecidos por la normativa.
Una segunda medición, esta vez de noche, llegaba a los casi 20 decibelios por encima de lo permitido. El alcalde explica que en principio, «cuando se avisó a la empresa, puso solución al problema «primero apagando a ciertas horas el aparato que emitía esos ruidos molestos» y después, cambiándolo definitivamente. Por tanto, el expediente sancionador no se va a interponer por parte del Concello.
«El viernes pasado lo quitaron definitivamente y pusieron otro que se supone que es más silencioso», explicó. De esta forma, comenta el regidor, «es más cómodo arreglarlo de esta forma que con un expediente».
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