La figura del Niño Jesús que tradicionalmente era presentada para la veneración durante las festividades navideñas ha desaparecido de la Iglesia de Santa Rita, en Barco. El párroco Jesús Álvarez informó que, desde hace dos días que ocurrió el suceso, la imagen fue sustituida por otra de las que decoran el altar del templo, permitiendo que los actos litúrgicos continúen con normalidad.
Durante la homilía de este domingo 5 de diciembre, víspera de Reyes, el párroco aprovechó para reflexionar sobre la importancia de mantener las puertas del templo abiertas, a pesar de incidentes como este. «Las iglesias deben estar abiertas para todos los que quieran entrar. Nadie empujará una puerta cerrada para comprobar si el templo está accesible, especialmente en un lugar como este, que forma parte del Camino de Invierno por el que pasan los peregrinos hacia Santiago», señaló.
Álvarez también destacó que tanto la iglesia como el cementerio deben seguir siendo espacios accesibles para la comunidad. «El hecho de que alguien robe, ya sea un objeto religioso o elementos del cementerio, no debe cambiar nuestra confianza en la inmensa mayoría de las personas, cuya buena intención supera estos actos aislados», comentó.
El párroco hizo un llamado a valorar la apertura y el acogimiento de la iglesia como un principio fundamental, sin que hechos como este alteren su vocación de servicio y hospitalidad. La comunidad ha tomado el suceso con tranquilidad y continúa participando en las celebraciones navideñas.
