Larouco vuelve a abrir su campo de voluntariado, que este año alcanzan su tercera edición. Están dirigido a jóvenes de 18 a 30 años y en esta ocasión participan un total de 13 personas de sitios de lo más variado, con gente incluso procedente de fuera del territorio nacional —República Checa, México—. También habrá participantes de Galicia —Vigo, Coruña, Ourense, incluido Valdeorras—. Vizcaya, Zaragoza y Madrid son otros de los lugares de referencia.
Los primeros trabajos se realizarán en la zona de O Castrillón, al igual que el año pasado, para después ampliar los trabajos a otras zonas. Por las mañanas, los jóvenes realizarán trabajos vinculados con la arqueología. «Se van a limpiar las cabañas del Castrillón y los lagares que se descubrieron en la edición pasada», explicó uno de los organizadores, Raúl Fernández.
En este sentido, aclaró que los voluntarios «no hacen trabajos arqueológicos —no excavan, porque no pueden—, lo que hacen siempre son trabajos de limpieza y apoyo, y están siempre supervisados por los arqueólogos».
En la parte ambiental, se procederá a la limpieza de los caminos y se continuará con la campaña de cajas nidos. «Descolgaremos las que están colgadas, para ver si anidaron y las limpiaremos. Además, colocaremos otras nuevas en otras zonas».
Y por la tarde se proponen visitas guiadas por el castro de Cabanelas, las ermitas o las cuevas de Seadur, entre otros muchos sitios.
Llama la atención que en ediciones anteriores ninguno de los participantes estuviera vinculado al campo de la arqueología. «Es enriquecedor que gente de otras disciplinas se interese por este mundo. En años anteriores han participado personas con perfiles muy diversos: médicos, ingenieros..», concluyó.
Los campos de voluntariado no sólo regresan a Larouco. Vilariño, Viana y A Veiga son otras de las localidades que también acogerán esta iniciativa.
