«Este espacio, que ahora consideramos periférico, fue central en su historia»: descubren en Casaio una aldea altomedieval

Carlos Tejerizo, arqueólogo de la Asociación Sputnik Labrego, desvela los detalles del último hallazgo en el Concello de Carballeda de Valdeorras

El arqueólogo Carlos Tejerizo, de la Asociación Sputnik Labrego, no oculta su entusiasmo tras los hallazgos realizados en los montes de Casaio (Ourense). «La verdad es que siempre que vamos a los montes acabamos encontrando algo, por algo será», comenta con humor.

Una aldea altomedieval y un cementerio único

Entre los descubrimientos más destacados, se encuentra una aldea altomedieval, fechada entre los siglos VII y IX. «Hicimos tres sondeos y lo que hemos descubierto es que es una aldea altomedieval de un momento, además, muy poco conocido», explica Tejerizo.

El hallazgo incluye también un cementerio, lo que resulta especialmente relevante para la arqueología del noroeste de la Península. «En todo el noroeste es difícil encontrar aldeas de este periodo en las que podamos estudiar tanto el mundo de los vivos como el de los muertos. Esto eleva mucho la importancia del sitio», señala.

Un posible vínculo con la ceca visigoda de Cassavio

El equipo tiene la hipótesis de que el lugar podría haber sido una antigua ceca visigoda. «Hay una moneda de época visigoda, un tremís de oro, que sabemos qué se hizo en el sitio de Cassavio», añade.

Pero la aldea no es el único hallazgo. «Hemos intervenido en siete sitios distintos», detalla Tejerizo, entre ellos «un castro de época prehistórica y una ermita del siglo XVII». Según el arqueólogo, estos descubrimientos trazan una línea histórica continua desde el Calcolítico hasta la actualidad.

«Lo que estamos viendo es que este espacio, que ahora consideramos periférico, fue central en muchos momentos de su historia. Valdeorras es una tierra que da muchísimas sorpresas», afirma.

Colaboración de los vecinos

El equipo de Sputnik Labrego también destaca la importancia de compartir estos avances. «A finales de mes haremos una pequeña intervención para cerrar algunos detalles y, sobre todo, presentaremos los resultados a quien quiera venir. Pensamos que es nuestra obligación», asegura.

Para Tejerizo, esta interacción con los vecinos de la zona es clave. «Ellos fueron los que nos pusieron en el camino de encontrar este sitio, y devolverles el conocimiento que hemos generado es una forma de agradecimiento», explica.

Futuro prometedor para la arqueología en la zona

El equipo continuará trabajando en Casaio y en otros puntos de Valdeorras, como Vilamartín, con nuevos proyectos en marcha. «Seguiremos por allí todo lo que el monte quiera que sigamos descubriendo, hasta que nos den las fuerzas», concluye Tejerizo, dejando claro que la región tiene aún muchas historias por desvelar.