Trevinca, el laboratorio de hielo que Galicia no puede permitirse ignorar

Trevinca, el laboratorio de hielo que Galicia no puede permitirse ignorar
Valerià Paül Carril, profesor titular de Análisis Geográfico Regional en la Universidade de Santiago de Compostela será el encargado de inaugurar este viernes el Al-Majisti Festival de A Veiga con la conferencia Pasaxes do Glaciarismo: Trevinca como laboratorio

El pico más alto de Galicia no es solo un hito geográfico: es una joya científica, cultural y paisajística con ecos de los Alpes y el Kilimanjaro. Así lo defiende Valerià Paül Carril, profesor titular de Análisis Geográfico Regional en la Universidade de Santiago de Compostela, que este viernes abrirá el Festival Al-Majisti con una conferencia sobre Trevinca como laboratorio del glaciarismo.

Doctor por la Universitat de Barcelona, Paül ha dedicado años a estudiar esta zona fronteriza entre Galicia y Castilla y León, donde se forjaron, a golpe de hielo, las huellas geológicas más antiguas de la comunidad. Asegura que la carga simbólica de Trevinca es comparable a la del monte Fuji en Japón o al Mont Blanc en Francia. «Non podemos pensar en Kenia ou Tanzania sen a montaña característica que está entre ambos dous países», comenta.

Su intervención en el festival no será una charla al uso. Será una invitación a mirar con otros ojos el paisaje, a reconocer en las formas del terreno las marcas del tiempo, y a entender por qué glaciólogos alemanes, suizos y austríacos se interesaron por estas montañas ya a principios del siglo XX. La clave: el glaciar del río Tera, que alimentó el Lago de Sanabria, nació justo al pie de Pena Negra, uno de los tres grandes picos del macizo.

Pero el interés por Trevinca no se queda en la historia del planeta. También mira al futuro. El libro que presenta el viernes, fruto de una colaboración con la Asociación de Turismo da Veiga e de Trevinca, pretende hacer accesible un conocimiento hasta ahora encerrado en revistas académicas. «A nosa intención é que isto sirva como ingrediente para promocionar o territorio», afirma, aunque advierte: no todo vale.

Paül defiende un turismo «reducido, especializado e respectuoso», alejado de modelos masivos como el de Covadonga o incluso el Everest. «Trevinca é media-alta montaña. Non se pode ir sen preparación. Pode haber desprendementos ou cambios meteorolóxicos extremos. Non é para todo o mundo», subraya. Aun así, el libro incluye rutas explicadas con rigor y diseñadas para quienes disfrutan caminando y contemplando la naturaleza con calma.

Preguntado por el valor de festivales como Al-Majisti, que combinan ciencia, literatura y astronomía, lo tiene claro: «Son maravillosos. Activan ao mesmo tempo a tecla da emoción e a do coñecemento racional».

La cita inaugural del festival será algo más que una conferencia: será un viaje a través del tiempo, la geografía y la conciencia ambiental. Y también una oportunidad para mirar de frente lo que tantas veces se nos escapa: que el patrimonio no siempre está en los museos, sino bajo nuestros pies.