Si el destino repartiese cartas, a Marcos Waldemar le habrían tocado los comodines. Nació el 31 de enero, día del patrón de los magos, y en la misma casa de Portomarín (Lugo) donde falleció su antepasado, el conde de Waldemar, un ilusionista que recorrió 69 países con su arte. ¿Casualidad? Él mismo admite que le gusta romantizar la historia, pero al final todo se reduce a una certeza: la magia le era inherente. Tanto, que ha convertido ese concepto en un espectáculo que el 14 de marzo llenará el Teatro Lauro Olmo de O Barco de Valdeorras de ilusionismo, teatro y comedia.
«Inherente» no es un show de magia al uso. No se trata solo de una sucesión de trucos asombrosos, sino de un viaje narrativo en el que cada juego forma parte de una historia mayor. «Es una obra donde el ilusionismo, el teatro y la comedia se unen para contar por qué hago magia y cómo este camino me ha traído hasta aquí», explica Waldemar. La trama está inspirada en su antepasado, el famoso conde de Waldemar, a quien Alfonso XIII concedió su título nobiliario por su talento. De Galicia al mundo y de vuelta a casa, donde falleció con casi 100 años. Dos décadas después, Marcos nacía en ese mismo lugar.
El artista admite que, aunque la historia parece escrita por el azar, la magia no es un don hereditario. «Nosotros tuvimos una escuela de magia en A Coruña y cualquiera puede aprender, aunque algunos tengan más predisposición que otros», explica. Lo que sí se hereda es la pasión, y él la tiene de sobra.
Muchos, quizá, aún no han oído su nombre, pero seguro que han visto su trabajo. Waldemar lleva años diseñando juegos para los mejores magos del mundo, incluidos los de Las Vegas. «Es como ser el 'negro' de los escritores, pero en la magia», bromea. Sin embargo, tras años en la sombra, ha decidido ser él mismo quien suba al escenario. Y lo hace a lo grande: en 2023 se fue de gira durante más de dos meses por Estados Unidos, desde Miami hasta Las Vegas, y ahora quiere llevar su show por toda Galicia y el norte de España.
«No puede ser que actúe por todo el mundo y no haya pasado apenas por aquí», dice con convicción. De ahí nace esta gira, con O Barco como punto de partida. «La intención es visitar todas las localidades con más de 10.000 habitantes», asegura.
¿Qué se encontrará el público que acuda a «Inherente»? Waldemar lo tiene claro: «Magia con olores, mentalismo imposible, cartas que cobran vida, momentos de pura comedia y otros llenos de emoción». Hasta insinúa que podría nevar en el teatro. ¿Truco o realidad? Solo los asistentes lo descubrirán.
Las entradas están disponibles en Entradium.com, a través del QR de los carteles repartidos por O Barco o en taquilla antes del show. Pero cuidado: puede que desaparezcan como por arte de magia.
