Este viernes el patio del Colegio Condesa de Fenosa de O Barco se ha convertido en un circuito de circulación en el que los participantes del campamento de verano han aprendido educación vial.
Patinetes, bicicletas, patines y hasta un kart han sido los vehículos que los pequeños han aprendido a manejar atendiendo a las señales de tráfico. «He aprendido a ceder el paso y el stop», nos contaba Marisa.
De esta enseñanza se han ocupado los agentes de la Policía Local de O Barco. Durante el curso escolar se pasan por los centros para hacer charlas relativas a la seguridad vial, por lo que esta actividad «es la práctica de lo que conocen en el cole. Todos saben perfectamente donde tienen que cruzar, las señales más importantes...», asegura Beatriz Delgado, agente barquense.
Una de las actividades estrellas de este campamento que poco a poco llega a su fin.