O Barco proyecta un centro de interpretación de la minería para impulsar el turismo y la economía local
El Concello de O Barco pondrá en marcha un centro de interpretación de la minería, un proyecto ambicioso que busca dinamizar el turismo, fijar población y aprovechar el enorme potencial patrimonial de la comarca. Así lo anunciaron este lunes el alcalde, Alfredo García, y el secretario general del Eixo Atlántico, Xoán Vázquez Mao, durante la presentación de esta iniciativa que irá de la mano de una estrategia más amplia centrada en el enoturismo y el reto demográfico.
«No queríamos hacer algo pequeño, que viesen solo los vecinos y acabase muriendo en sí mismo», aseguró Alfredo García. «Lo que planteamos es una propuesta con entidad, capaz de atraer visitantes, divulgar nuestra historia minera y dar vida a toda la comarca de Valdeorras».
El futuro centro de interpretación no será un museo al uso, sino un espacio dinámico, interactivo y didáctico, con capacidad para exposiciones, conferencias, conciertos y visitas escolares. El objetivo es mostrar la riqueza minera de la zona desde época romana hasta la actualidad, incluyendo el papel de la pizarra, de la que España es el mayor productor mundial. Para ello, se plantea ubicar el centro en los antiguos hornos de CEDIE, ya en proceso de limpieza y recuperación.
Vázquez Mao destacó que el proyecto se enmarca en las líneas estratégicas que el Eixo Atlántico desarrolla en la comarca: «O Barco es nuestro territorio de referencia, por su posición privilegiada entre dos patrimonios de la humanidad —Las Médulas y la Ribeira Sacra—, su potencial vitivinícola y su historia minera única». Además, recordó que ya está en marcha una hoja de ruta sobre enoturismo elaborada por la Universidade de Vigo, y que el centro de interpretación será clave para dar contenido cultural y atractivo al modelo turístico que se quiere implantar.
El alcalde adelantó que la iniciativa se desarrollará mediante una fundación en la que participen tanto el Concello como empresas, administraciones y universidades. «Queremos que sea algo abierto, participativo y sostenible», explicó. También insistió en la vocación educativa del proyecto: «Si conseguimos que cada semana lleguen autobuses escolares, eso generará movimiento en la comarca. Y si a los niños les gusta, luego vendrán los padres».
El centro se encuentra aún en fase de diseño y estudio de viabilidad, pero tanto el Concello como el Eixo Atlántico aseguraron que ya hay un calendario de trabajo definido y que, si todo va según lo previsto, la documentación estará lista a finales de 2025 o principios de 2026. «Estamos convencidos de que lo vamos a conseguir. Es un proyecto que puede cambiar el futuro turístico y económico de Valdeorras», concluyó García.