Brian Castro, gol y talento valdeorrés al servicio del Arzúa

Brian Castro, gol y talento valdeorrés al servicio del Arzúa
 El joven delantero de A Rúa despunta en el conjunto que prepara Alberto Mariano

El ataque del CSD Arzúa —equipo de Tercera RFEF que jugó este fin de semana contra el CD Barco—  se reforzó bien este verano. El entrenador, Alberto Mariano, decidió incorporar a futbolistas jóvenes y con gran proyección. Brian Castro Prada (A Rúa, 2003) es uno de ellos.

Este valdeorrés lleva pegado a la pelota desde que tiene uso de razón. Dio sus primeros pasos en la cantera amarilla, la del CD Rúa, y en el segundo año de infantil hizo las maletas para afrontar un reto muy ilusionante pese a su corta edad: fichar por todo un CD Lugo, palabras mayores.

Brian Castro en una jugada en O Barco

Así que Brian, que contó en todo momento con el apoyo de su familia, pasó «cuatro años yendo y viniendo a Lugo», un gran esfuerzo que tiempo después vería recompensado.

Cuando alcanzó la etapa juvenil la cosa cambió y el futbolista de A Rúa se trasladó de forma permanente a la ciudad de la muralla. Se convirtió en un futbolista importante del juvenil del CD Lugo y «esos últimos tres años estuve ya viviendo allí, en una residencia puesta por el club», explica.

Finalizada la última etapa de formación y a sus 19 años, a Brian le tocó “dar el paso”, un reto que afronta en una categoría cada vez más exigente y especialmente igualada esta temporada, la Tercera RFEF. El jugador de A Rúa dice que su objetivo es “aprender lo máximo que pueda”.

Está contento por haber aceptado la propuesta del CSD Arzúa, que este año apostó por el talento joven. «Tuve mucha suerte por el cuerpo técnico que me tocó este año, confían mucho en mí y yo intento devolvérselo», señala Brian en declaraciones a Somos Comarca.

Un partido especial

El joven futbolista vivió este domingo un partido especial. Regresaba a Valdeorras y no era para visitar a su familia como suele hacer habitualmente, sino para medirse al CD Barco. «Siendo de A Rúa afronté el partido casi como un derbi, porque vino mucha gente que me conoce, muchos amigos y mi familia», dice.

Su familia, explica, lo sigue en los campos con asiduidad. «Siempre que pueden intentan acercarse a verme jugar y para mí es un orgullo», dice Brian, consciente de que, sin el apoyo de sus familiares, que confiaron en él desde el primer momento, no hubiese podido llegar tan lejos.

En el Arzúa destacan de él «su trabajo y ganas», que ya le han permitido anotar dos goles en las primeras dos jornadas del campeonato, ante el Somozas y el Racing Vilalbés. Y esto no ha hecho nada más que empezar para Brian, cuyo hermano también apunta maneras: es el portero del equipo juvenil del CD Barco, Denis.