Los campamentos de verano en Valdeorras y Quiroga abren sus puertas
Las clases han terminado, pero los trabajos no. La conciliación familiar entre trabajo y vacaciones se puede convertir en tarea difícil en esta época del año. Para esto, los concellos y asociaciones realizan diferentes campamentos de verano, normalmente, divididos en quincenas.
O Barco, campamento de Valagume
Ángeles Delgado, coordinadora del campamento Vagalume, definía las primeras horas como: «Una gran algarabía». Los vecinos de O Barco que pasaban por los alrededores del CEIP Julio Gurriarán aún creían que el centro educativo seguía con el transcurso normal de las clases.
Desde la organización han planeado diferentes actividades alrededor de la historia, este año el protagonista es el Mago de Oz. Manualidades, juegos con agua, scape room o educación vial, este es un pequeño resumen de todo lo que van a disfrutar los más pequeños en este campamento. «Vamos a hacer un montón de cosas, creo que no nos va a dar tiempo ni de respirar», asegura Delgado.
Alrededor de 150 niños son los que estarán los primeros quince días de julio, «ya tenemos matriculados muchos más en agosto, pero vamos trabajando por quincenas, para organizar», matiza.
A Rúa, campamento del CD Rúa
«Este é o sexto ano consecutivo que facemos o campus», asegura Luis del CD Rúa. Durante el mes de julio, dividido en tres tandas, irán acudiendo todos aquellos que se hayan inscrito.
A primeras horas harán ejercicios de fútbol, al final de la mañana acuden a la piscina municipal. A mayores, «este ano tamén vamos ter un torneo de petanca, charlas ou un curso de primeiros auxilios», explica Luis.
Vilamartín, campamento Vilaverán 24
Iván Guntiñas, Gunti, es el coordinador del campamento de verano que se desarrolla en Vilamartín de Valdeorras. Una de las novedades de este año es que se incrementa una hora la duración. En esta nueva edición los más pequeños estarán cuatro horas disfrutando de diferentes actividades para que así «los padres puedan conciliar mejor la salida del trabajo», relata Gunti.
«Mantendremos la esencia de siempre, mucho deporte, actividad deportiva, manualidad, salidas culturales», resumen el coordinador del campamento. Otro de los objetivos es dar a conocer el entorno de Vilamartín y la zona de O Bañadoiro. En el primer turno se han inscrito 57 y en el de agosto «deben quedar tres o cuatro plazas».
Petín, campamento de Pinchacarneira
«Vamos a dedicar este verán a facer un campamento de cine», explica Rocío Basalo, monitora del campamento Pinchacarneira de Viana. Cada semana se les contará una película diferente. Después, se les propondrán diferentes juegos o manualidades, relacionados con el filme explicado, a los más pequeños.
Sumado a esto, también se planean una serie de salidas por el municipio y todos los viernes acudirán a las piscinas municipales de Petín.
Campamento de Rubiá
Esta es la tercera edición que celebran en Rubiá. Leticia Rodríguez es una de las tres monitoras que estarán los próximos días con los 35 niños, de 10:00 a 13:00, anotados este año en el campamento.
El principal objetivo es «que o pasen ben». Para conseguir su meta, se moverán por diferentes puntos del municipio, aunque «faremos a maioría no pavillón». A mayores, la casa de la cultura acogerá diferentes talleres, por ejemplo uno de higiene bucal.
Campamento de Quiroga
Esta mañana de uno de julio también comenzaban los campamentos de verano en el Concello de Quiroga, con más de un centenar de niños inscritos. En esta nueva edición se podrán ver diferentes novedades. La primera de ellas es que los campamentos que se desenvolverán durante los meses de julio y agosto cuentan con una subvención del Plan Corresponsables de la Xunta de Galicia solicitada a través del CIM.
Esta ayuda permite que, además de los voluntarios, se cuenta con jóvenes contratados a los que se les exigió una titulación relacionada con el trabajo que van a desarrollar.
Otra de las novedades es que los campamentos empezarán antes. Las puertas se abrirán a las 10:00 y la hora de finalización será a las 14:00. Los campamentos están abiertos tanto a los niños que viven en Quiroga como a los que acuden al municipio en vacaciones, con edades comprendidas entre los tres y 12 años.