D'Berna: «Cada botella encierra el esfuerzo de generaciones»
Berna Guitián, propietario de Bodegas D’Berna, habla con pasión de su proyecto: «Llevamos 16 años poniendo alma y esfuerzo en cada botella, pero esta historia empieza mucho antes, en las viñas que heredamos de mi abuelo en Córgomo, Vilamartín». Con 12 hectáreas de viñedos propios y 16 años de trayectoria, esta bodega familiar ha logrado posicionarse entre las mejores, gracias a su apuesta por la calidad y el trabajo constante.
Su propietario, Berna Guitián, comparte con nosotros cómo han convertido el sueño de una pequeña producción en un proyecto consolidado que hoy embotella alrededor de 150.000 botellas de Godello, 60.000 de Mencía y unas 8.000 de sus variedades más exclusivas, como Sousón y Garnacha Tintorera.
«Estamos muy contentos con la cosecha de este año. Tanto en cantidad como en calidad, ha sido espectacular», afirma Berna, destacando la importancia del terreno privilegiado donde crecen sus uvas. Gracias a una ubicación única, las viñas reciben un excelente aporte de sol, lo que garantiza la madurez y el sabor característico de sus vinos. Estas cualidades se reflejan en cada botella, que pasa por un proceso minucioso desde la viña hasta su distribución.
Aunque sus viñedos tienen una media de 35 a 40 años, Bodegas D’Berna combina la tradición con las últimas tendencias en viticultura. Desde sus inicios, cada cosecha ha sido reconocida con premios nacionales e internacionales, consolidándose como una de las bodegas más valoradas de Valdeorras. «Los premios siempre son un impulso, pero el oro que obtuvimos en nuestro segundo año, en la Cata de la Xunta de Galicia, ocupa un lugar especial en nuestra historia», recuerda Berna con orgullo.
La alta demanda del Godello en el mercado hace necesario ampliar los viñedos, pero lograrlo no es tarea fácil. «Cada hectárea que compramos implica negociar con varias personas, pero el esfuerzo vale la pena porque el terreno aquí es único», explica Berna. Este año, D’Berna ha conseguido añadir una hectárea y media más, un paso importante para que su producción siga satisfaciendo a un mercado que no deja de crecer. Este año, D’Berna ha ampliado su superficie con una hectárea y media más, asegurando que su producción siga respondiendo a la creciente demanda.
Un vino para cada momento
La gama de vinos de D’Berna es amplia y versátil, pensada para acompañar todo tipo de platos y ocasiones. Para estas Navidades, Berna nos propone los vinos que mejor sientan a cada plato de una comida o cena típica de estas fechas. El Godello joven, fresco y equilibrado, es ideal para mariscos y entrantes, mientras que el Godello sobre lías, más complejo, se convierte en la elección perfecta para pescados y platos más elaborados.
Para carnes ligeras, el Mencía joven destaca por su suavidad, y las variedades Garnacha Tintorera y Sousón, criadas durante 12 meses en barrica, son opciones excelentes para acompañar carnes rojas y guisos potentes. Berna enfatiza que sus vinos rompen los tópicos tradicionales de maridaje: «Hoy en día el Godello se disfruta tanto con pescados como con carnes, y nuestra Garnacha o Sousón elevan cualquier plato».
Una apuesta por la familia y el futuro
Detrás de cada botella de D’Berna está el esfuerzo conjunto de una familia que cuida cada detalle, desde la viña hasta la comercialización. «Somos una bodega familiar, y eso se nota. No hay muchas bodegas que puedan decir que supervisan todo el proceso», comenta Berna. Este enfoque cercano, junto con la experiencia acumulada durante más de tres décadas, es lo que hace que cada vino de D’Berna sea especial y merezca un lugar destacado en las mesas de cada casa estas fiestas.
Con viñedos centenarios heredados de su abuelo y la pasión por una tradición que combina innovación y autenticidad, Bodegas D’Berna se consolida como un emblema de Valdeorras. Sus vinos no solo son el reflejo de un terreno único, sino también de una historia de esfuerzo, dedicación y amor por el buen vino.