ETM fija un plan a dos años para reactivar la mina de coltán de Penouta con el respaldo de la Xunta
La mina de coltán de Penouta, en el municipio ourensano de Viana do Bolo, encara una nueva etapa tras su adquisición por parte de la compañía australiana Energy Transition Minerals (ETM), que ya trabaja en la consolidación de las instalaciones y en una hoja de ruta que permitiría retomar la producción en torno a 2027.
Aunque la empresa no concreta por ahora cifras cerradas ni de inversión ni de empleo, sí ha avanzado algunas líneas clave del proyecto. Una de ellas es su apuesta por el tejido económico gallego: ETM prevé que alrededor del 85% de las empresas contratistas que participen en la reactivación de la mina sean de Galicia, mientras que el porcentaje de trabajadores locales podría situarse en torno al 95%, siguiendo el modelo aplicado por el grupo en otros proyectos mineros en España.
En este sentido, la compañía considera lógica y natural la reincorporación de antiguos trabajadores de Strategic Minerals, la anterior gestora de la explotación, siempre que el nuevo proyecto avance conforme a lo previsto y se obtengan los permisos necesarios.
Una estrategia alineada con Galicia y la UE
Desde ETM insisten en que Penouta debe encajar tanto en la estrategia gallega de reindustrialización como en los objetivos europeos de garantizar el suministro de materias primas críticas, como el coltán, esencial para la electrónica y la transición energética. La empresa ya ha manifestado su intención de coordinarse estrechamente con la Xunta de Galicia durante todo el proceso administrativo y ambiental.
En este marco, la compañía no descarta la implicación de Recursos de Galicia, la empresa impulsada por la administración autonómica para participar en proyectos estratégicos. Según han explicado responsables de ETM, son conocedores del papel de esta sociedad público-privada y de su reciente implicación en otras iniciativas mineras en la comunidad.
La dirección del grupo considera clave involucrar a todos los actores relevantes —administraciones, empresas públicas, sector privado y entorno local— para dar solidez al proyecto de Penouta y reforzar su viabilidad a largo plazo.Eso sí, en sus planes también se incluye trasladar la sede social a Viana do Bolo y crear una oficina en Santiago con la que agilizar los trámites con la Xunta de Galicia.
Primeros pasos antes de la plena reactivación
El plan de la compañía pasa por avanzar de forma progresiva, comenzando por la puesta en valor de las infraestructuras existentes y el desarrollo de las áreas del yacimiento que cuentan con una tramitación más avanzada, mientras se completan los estudios ambientales y administrativos necesarios para el conjunto de la explotación.
Si los plazos se cumplen, ETM confía en que la mina pueda volver a estar operativa dentro de dos años, abriendo así una nueva etapa para una explotación que durante años fue símbolo tanto de oportunidad industrial como de conflicto judicial y ambiental.
La herencia financiera del proyecto y su impacto en la banca
En peores arenas navega la antigua empresa propietaria de la mina y es que el proceso de insolvencia de la antigua empresa gestora también ha dejado huella en el ámbito financiero. Según registros judiciales, la quiebra de la compañía ha generado pasivos significativos que alcanzan varios millones de euros, con una lista de acreedores que incluye grandes entidades bancarias, como Banco Sabadell, BBVA y CaixaBank, además de proveedores y suministradores de servicios.
Los documentos del Juzgado de Primera Instancia número 4 de Ourense reflejan que la deuda total de la compañía superaba los 6 millones de euros, con el Sabadell como principal acreedor garantizado y otros bancos como BBVA y CaixaBank entre los no garantizados, al igual que diversas empresas proveedoras.
Este agujero financiero ha añadido otra dimensión al ya complejo caso de Penouta, al poner de manifiesto el impacto que puede tener la quiebra de un proyecto minero de tal envergadura no solo en la economía local, sino en el sistema crediticio que financia este tipo de inversiones.