De estudiar en el IES Xermán Ancochea a trabajar como operador de parques eólicos
Javier Castro, exalumno del IES Xermán Ancochea Quevedo, es uno de los muchos ejemplos de estudiantes que eligieron uno de los ciclos formativos de la familia de electricidad y electrónica que ofertan desde el centro educativo de Trives.
En concreto, se decantó por el Ciclo Superior de Sistemas Electrotécnicos y Automatizados hace cinco años. Ahora, se encuentra trabajando como operador de parques eólicos. Su empleo consiste en «diagnosticar las alarmas, gestionar los datos y lo que le pueda surgir a cada eólico».
Desde que se graduó en la FP existieron varias opciones de empleo, pero «siempre valorando lo que mejor me convenía». Además, señala que el campo de la electricidad tiene «una gran diversidad de ofertas de empleo».
Una de las partes positivas de realizar este ciclo es que provoca que «tengas un mayor campo de visión de lo que hay detrás de todo lo que haces». A pesar de esto, el ciclo era «en parte sí, en parte no» lo que esperaba, ya que muchas cosas de las que realizaba «las desconocía».
El primer paso que dio en el mundo de la formación profesional fue terminar el bachillerato y, posteriormente, al tener la opción de seguir sus estudios en el mismo centro, se decantó por la electricidad.
A mayores tenía la ventaja de conocer de antemano a los profesores, esto le generó «confianza y apuestan por ti», detalla Javier. El exalumno matiza que terminó «con una satisfacción gratificante» a pesar de los pequeños baches que se encontró por el camino.
Una visión diferentes sobre las FP
En estos momentos es visible el auge que está sufriendo la formación profesional. Javier notó que parecía estar con «un nivel más bajo», ya que todos sus compañeros se fueron a estudiar una carrera. Su realidad fue muy diferente, un ciclo «te ofrece los conocimientos y habilidades prácticas», en cambio, una carrera «tiene la parte más teórica», asegura.