Guzmán Díaz: «Trato de vender produtos exclusivos e de calidade é o único que tira para adiante sempre»
Murias Petín se dedica a la comercialización de carne de cerdo con carnicería propia en este concello de Valdeorras
Guzmán Díaz es el gerente de Murias Petín, una empresa que se dedica a la comercialización de carnes de cerdo. Siguen la tradición familiar para elaborar productos donde la calidad es primordial. «Non entro a fabricar produtos que non teñan calidade por abaratar costes», así de contundente es Díaz al respecto.
Murias Petín recibe el nombre del apodo familiar y del lugar donde está situado el negocio. Venden canales y todo lo necesario para la matanza, desde la carne, al hilo de atar los chorizos. Elabora todo tipo de embutidos: salchichón, chorizo, lomo, androllas, pigureiros o botelo. En la carnicería situada en la carretera de Carballal se pueden encontrar todo tipo de carnes de excelente calidad y últimamente trufados caseros hechos con la receta de antaño. El de lacón o cabeza de cerdo están exquisitos.
Desde el comienzo de la empresa hasta hoy, han mejorado las condiciones de trabajo, hay más maquinaria y se aplican nuevas tecnología pero no ha cambiado la esencia, ni la forma tradicional de elaboración. «Eu acórdome a elaborar o embutido en artesas de madeira. Logo compramos unhas barquelas de poliester que daquela eran o último. A primeira máquina de amasar que comprou o meu pai, levaba 25 kilos de carne e a embutidora de pistón, 15», recuerda Guzmán. Hoy la empresa tiene máquinas que embuten 4.000 kilogramos a la hora.
En cuanto a la manera de curación ha cambiado también, aunque sigue siendo la misma leña de roble y el proceso es el mismo. Cambia la manera de hacerlo «hai que ter máis coidado»
«Véndese para tendas que aprecian o que se fai en Galicia», señala respecto al mercado. Los productos de Murias Petín viajan hasta el País Vasco, Cataluña, Madrid y a gran número de comercios en varias localidades de Galicia. En cuanto a particulares París, Berna, Londres, Nueva York o San Diego son algunos de los destinos de estos preciados embutidos.
Durante las dos primeras semanas de confinamiento vendió mucho e incluso pasaron personas de O Barco o Ponferrada «pensaban que se quedaban sin carne. Elí quedou todo agotado e viñan desesperados pensado que se acababa», explica. «Carne vamos a ter siempre, todo o que sea básico vámolo ter», añade. Fue una época según Guzmán
Negocio Familiar
El padre del acual gerente, Amadeo Díaz, fundó el negocio familiar. Hombre al que le apasionaba el campo, emigró junto a su mujer "Manola" a París para hacer unas "perrillas", la vida en la ciudad no le gustó así que regresó a tierras Valdeorresas. Construyeron una casa en Petín y volvió a trabajar las tierras. Una cuadra al lado de casa en la que él y su mujer criaban cerdos, ayudaba a la economía familiar. El negocio iba bien, así que montaron una granja en Barxela y más tarde se incorporó a la empresa una carnicería en el bajo de la casa familiar. «Seguiu cas viñas. A ilusión del era o arado. Empezou a vender cerdos que lle gustaba moito, iba a Sarria a buscalos e montou unha empresa, pequena pero, bien. Mui chula », señala Guzmán.
La carnicería que tienen en la actualidad surgió de la noche a la mañana, «chegou un día e dixo: "hai que montar unha carnicería". Casualmente Amancio, «un gran amigo da familia», non quería a carnicería e dun día para outro comproulle todos os "cheles" e aquí a montou en 24 horas», indica Díaz.
Amadeo era hombre de campo al igual que Guzmán —aprovecha cualquier ocasión para irse a los viñedos familiares—, así que dejó a Manola al frente del negocio para seguir dedicándose a lo que más le gustaba, las labores agrícolas. «O meu pai non era home de estar detrás do mostrador, e o que me pasa a min, así que a montou e dixo: , resalta"Manola aí che queda"», apunta.
«Eu sempre estiven traballando co meu pai. Desde os cinco anos ia con el no camión a buscar o gando. Tiñamos proxectado montar unha fábrica de embutidos entre os dous pero por desgracia faleceu», recuerda. Guzmán junto a su madre se puso al frente del negocio en el que sigue desde hace 28 años.
Futuro
Nuevas instalaciones adaptadas a los nuevos tiempos a las que se incorpora la venta Online. «Hai que ir cos tempos, se non quédaste para atrás. aínda temos moito que mellorar pero gústame avanzar», apostilla. El futuro pasa por incorporar la tecnología al negocio, por eso ha creado una página de venta aunque seguirá atendiendo a la gente en el negocio como lo ha hecho siempre.
a lo lardo del año da trabajo a tres personas y durante la campaña de invierno duplica el número de trabajadores. Son personas de la localidad ya que este empresario apuesta por sus vecinos y «antes eles que a outros».
Las matanzas tienden a desaparecer
En diciembre comienza la campaña de invierno en la que Murias Petín vende canales y carne picada para la elaboración de embutidos, aunque cada vez son menos los que optan por ello. Como el mismo reconoce «A xente que realmente aprecia o embutido e sabe facelo e a xente maior e por desgracia cada vez hai menos e por tanto véndese menos. A xuventude pasa de facer embutido, compran para o día e, se acabó».
Además las condiciones meteorológicas, tampoco ayudan para la elaboración de embutidos en las casas. «Hai invernos que non para de chover e as temperaturas chegan ós 20 graos e así non se pode»,.
Festa da Freba
Guzmán Díaz junto con Miguel Bautista, ex-alcalde de Petín y Amancio Díaz fueron los promotores de la fiesta gastronómica que desde hace más de veinte años se celebra en la localidad, en el puente de la Constitución. Murias Petín proporciona el embutido desde la primera edición, «estou encantado de ser o promotor», señala al respecto.
Otro evento al que siempre asiste Murias Petín en a la Feira de 1812 o a la Ruta de las Bodegas, ambas en el municipio petinés.
Seguir en la misma línea siempre pensando en la calidad que «foi o que me enseñaron y así vou a seguir».
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