jueves. 28.03.2024

Por el momento no está permitido bañarse en el río porque todo apunta a que las aguas residuales son fuente de contagio

Los días de sol y altas temperaturas comienzan a ser más frecuentes en la comarca. El verano está a la vuelta de la esquina y muchos ya están deseando pegarse el primer chapuzón aunque, cómo no, el coronavirus también puede cambiar esto. Por el momento se desconocen las normas que deberemos seguir para acudir a piscinas, playas o a las orillas del río, pero concellos como el de O Barco comienza a prepararse.

El equipo de Gobierno regido por Alfredo García estudia cómo se abrirá la piscina de verano, «porque dentro de un mes ya se podría». Donde todavía existen dudas es en la playa fluvial del Río Sil, una de las zonas favoritas de los barquenses para disfrutar de las tardes veraniegas. «Todo apunta a que las aguas residuales son una fuente de contagio importante y, lógicamente, no hay tratamiento de cloro, por lo que los restos acaban en el cauce».



Serán los responsables de Sanidad del Gobierno central quienes decidan las pautas a seguir este verano, pero por ahora está claro que no está permitido meterse en el río, aunque algunos se saltan esta norma. «Una vecina nos dijo que ayer había varios jóvenes en la zona del Casino bañándose. Ya le he dicho a la Policía que controle esto».

Y es que el problema es que en el río Sil hay diferentes saneamientos que vierten sus aguas sin ningún tipo de tratamiento. «Imaginemos que, por divertirse, alguien lo pilla y lo contagia en casa. Tenemos que ser responsables. Hay cosas que no se pueden hacer y no pasa nada».

Si desea escuchar la entrevista completa a Alfredo García pinche en el siguiente enlace:

O Barco se prepara para el verano con dudas respecto al río