El Concello de O Barco da una oportunidad al medio rural

El Concello de O Barco ha presentado las Xornadas sobre as Oportunidades do Medio Rural, una iniciativa que quiere poner en valor el rural para demostrar que tiene futuro, y además poner la atención en que el monte tiene que producir para que así deje de arder. «Si el monte produce dejará de ser un problema; todos tenemos que implicarnos para que así, todo aquel quiera montar una explotación tenga posibilidades de hacerlo», explicó Alfredo García, alcalde de O Barco.

La idea de las jornadas, según cuenta el regidor, es «implicar a los dueños de los terrenos y explicarles que hay experiencias que funcionan que deberían considerar». Para ello, el Concello ha lanzado seis cursos dirigidos a toda la población interesada, a los que se podrá asistir sin previa inscripción ni coste alguno por asistencia. Los cursos se llevarán a cabo en lunes a las 19:00 horas a partir del día 10 de diciembre y el primero de ellos, A loita contra o abandono e a movilización de terras productivas impartida por el Subdirector de Mobilidade de Terras, responsable del Banco de Tierras de Galicia. «Vamos a empezar por el principio, hay un organismo en Galicia que tiene la finalidad de coger tierras y ponerlas a disposición de quien quiera trabajarlas», explica el alcalde.

A partir de esta jornada más técnica, el Concello pondrá en marcha otras cinco en las que los promotores y gerentes de diversas explotaciones explicarán sus experiencias, entre ellas, las que tienen que ver con el cultivo del arándano, la recuperación del olivar gallego, la gestión del porco celta, la gestión de los soutos de castañas o las plantaciones hortofrutículas. «Proyectos todos ellos con futuro y que están funcionando», apunta García.

A través del banco de tierras que posee el proyecto Agader de la Xunta de Galicia, podrían gestionarse los terrenos a cultivar. El alcalde asegura que este organismo «está deseando poder ofrecer sus terrenos a gente que quiera vivir de ellos».

Para García, la responsabilidad de que el rural no se despueble debe empezar por las instituciones. En su empeño está, dice, «erradicar la maldición que cayó sobre el rural y que lo despobló bajo la creencia de que el futuro estaba solo en la ciudad». Prueba de esta apuesta es un proyecto en relación con castaña, en el que el propio Concello está involucrado.

«Hemos conseguido que unos propietarios de una comunidad de montes les pareciera bien la idea; a partir de ahí hicimos planos y se los mandamos al banco de tierras, así que cualquier día vendrán los técnicos de Agader a tomar contacto y para el año que viene podríamos verlo hecho realidad, ahora está a nivel de proyecto aunque ya hay un par de empresarios interesados», explica.