La Xunta destinará una partida de 400.000 euros para mejoras en colegios de Valdeorras
La Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria ha anunciado una inversión aprovechando el período no lectivo de los meses de verano, el nuevo Plan de Dotación de Infraestructuras Educativas 2016-2020. Éste se financiará con los recursos obtenidos a través del Fondo de Superávit de Responsabilidad, con el que el Gobierno Central recompensa a Galicia por cumplir con el objetivo de déficit, y del plan anual RAM.
La delegada territorial de la Xunta en Ourense, Marisol Díaz Mouteira, considera que estas actuaciones son una “mostra clara” de la apuesta de la Xunta por la educación pública “porque investir en equipamento é tamén investir en calidade”. Díaz Mouteira señaló positivamente que el “correcto cumprimento co déficit marcado polo Goberno estatal revirta en melloras para os cidadáns nun ámbito tan sensible como o educativo” y destacó el trabajo de la Xunta de Galicia para seguir avanzando en la adecuación de las instalaciones con el fin de continuar la mejora de las condiciones de trabajo y estudio de docentes y alumnos.
Aunque ni la delegada territorial ni la conselleria especificaron qué colegios serían los beneficiados por estas obras ni cuáles se llevarían a cabo, desde la delegación señalaron que en la comarca de Valdeorras se invertirán un total de 400.000 euros y destacaron que las obras concretas se anunciaran por la delegada en próximos días.
Una de las obras más necesarias en O Barco es la exigida por los padres del colegio Julio Gurriarán. Un pabellón de deportes del cual ahora no disfrutan. A pesar que desde las filas del PP han anunciado que se realizará la obra, ni la directiva ni los padres han recibido notificación de los mismos.
Los padres señalan que, tras su petición de esta construcción a través de la presentación de casi 900 firmas, la delegada se puso en contacto con el equipo directivo para interesarse por esta petición y señaló que ya estaba en marcha. A pesar de estos anuncios la comunidad educativa no conoce el proyecto.
Añaden que no quieren, como se ha sugerido, que el pabellón sea el cierre del actual patio cubierto. “Los niños lo necesitan para jugar en las mañanas de invierno y cuando llueve”, destacan y añaden que tienen espacio suficiente en el colegio para hacer un pabellón y dejar el patio cubierto.