Varias víctimas del fraude así como la Asociación Protectora de Animales «Peludines Sin Suerte» de Ponferrada han sido las que han dado la voz de alarma. Una presunta red de venta fraudulenta a gran escala de cachorros de perro enfermos está actuando en la provincia de León, Lugo y la comarca de Valdeorras creando un posible foco de zoonosis.
Desde la asociación señalan que los supuestos estafadores recogen los perros que se regalan a través de Internet cuando el dueño no los puede atender. Así, los cachorros son hacinados sin higiene ya que después se les han detectado diferentes enfermedades como parvovirus, coronavirus de perro y guardias.
Una vez tienen los perros en su poder, anuncian su venta a través de Internet señalando que son perros de raza (llegan a teñirlos con tinte humano para provocar el engaño). Una vez el comprador acude al lugar en el que ha sido citado, el cambio es muy rápido y le dan el perro en brazos por lo que el comprador no se da cuenta de lo sucedido hasta horas más tarde, cuando observa que el perro está enfermo. En muchos casos acaban muriendo.
«Indagando, nos hemos puesto en contacto víctimas del fraude, particulares que les han dado camadas y veterinarios que han atendido numerosos casos similares. Sabemos que operan desde hace al menos 5 años», destacan desde la protectora donde aseguran que los presuntos estafadores utilizan fotos de cachorros de otras personas publicadas en internet. «Sabemos de casos que han tenido a los cachorros enfermos en fincas privadas que no les pertenecen y sin permiso», admiten.
«En uno de los casos, vendían un supuesto cachorro de golden retriever dorado, al que le habían decolorado y teñido el pelo y resultó ser un pitbull negro atigrado. Sobrevivió al parvovirus, pero tuvo problemas en la piel por la decoloración. En otro caso, la cachorrilla tenía la pata rota, y el cirujano dijo que llevaba más de un mes con esta lesión», detallan señalando que en otro caso, el cachorro sobrevivió al parvovirus, pero contagió al perro de 3 años que tenía la persona en casa y falleció.
Además, señalan que los perros pueden ser un foco de infecciones como el caso de un cachorro que tenía parvovirus, coronavirus de perro y giardias, por lo que tuvo que ser sacrificado e incinerado. «Legalmente no podían dejar que la dueña se llevara el cuerpo con una carga vírica tan elevada».
«Personas de la zona de Ponferrada nos dicen que han aparecido cachorros muertos en contenedores, en cajas y en el río. Teniendo en cuenta que los cachorros están contagiados de diversas enfermedades, puede ser un peligro para la salud pública», concluyen.
Con esta denuncia, la protectora busca dar la voz de alarma y que los posibles clientes estén alerta y adquieran estos animales.
