El documento rechaza que la eléctrica abandone su centro de mando en el municipio y la empresa lo desmiente: sólo afecta a 16 puestos de trabajo
El gobierno bipartito de A Rúa, formado por BNG y PSdeG-PSOE, junto con el gobierno socialista de Petín, han anunciado en la tarde del jueves 11 de abril, en rueda de prensa, la presentación de una moción conjunta, relativa a la «deslocalización» de la empresa Iberdrola. «Somos conscientes y sabemos que en los últimos días hay un rurun en el pueblo porque parte del personal de Iberdrola se va a desplazar a Salamanca para concentrar allí un poco toda la gestión de esta empresa», anunció el alcalde de A Rúa, Luis F. Gudiña.
Por tal motivo, expresó el regidor de A Rúa su «rechazo a que la eléctrica abandone su centro de mando de A Rúa, porque supone la pérdida de puestos de trabajo, y que muchas de las familias asentadas en nuestro concello tengan que desplazarse, sufriendo las consecuencias del desplazamiento». Asimismo, exigió a la Xunta de Galicia «que se ponga en contacto con Iberdrola para evitar la deslocalización de la empresa en nuestro país».
En la mañana del propio jueves 11 de abril, la empresa ya se pronunciaba en este medio, por boca del director de Generación Sil, Miguel Ángel López, advirtiendo que únicamente se trata del traslado de un departamento a la sede de Salamanca que afectaría únicamente a 16 puestos de trabajo. Para el regidor de A Rúa, «si empezamos ahora con una parte, sabemos que puede terminar convirtiéndose en un todo».
La teniente alcaldesa de A Rúa, María G. Albert, expresó su convencimiento de que «todo el servicio del centro de control se va a deslocalizar a Salamanca, patria chica del gerente de la empresa que quiere llevarse todos los servicios que pueda a su lugar de nacimiento». Según su criterio, hacer esto supondría «un escándalo y una contribución al abandono del rural que estamos padeciendo; nos quitan las infraestructuras, los medios de transporte, la sanidad y ahora nos quitan Iberdrola». Es por ello que no dudó en afirmar que el grupo de gobierno llama a la protesta, «debemos iniciar movilizaciones o acciones de otro tipo para evitar que Iberdrola marche», dijo.
Incidió González Albert en la idea de que debe ser la Xunta quien interceda porque «tiene capacidad para incidir sobre esta empresa, porque se está nutriendo de nuestras aguas y se ha nutrido de nuestro territorio durante muchos años».
Por su parte, Miguel Bautista, alcalde de Petín, advirtió que «de momento, son 16 puestos de trabajo» y que «en nuestra mano está que no sean más». Acusó a la empresa de haberse llevado los mejores terrenos de la comarca» dejando entrever la responsabilidad adquirida con el territorio donde ubicó Saltos del Sil en su día.
Al término de la comparecencia, Luis Fernández Gudiña anunciaba la presentación de una propuesta de revisión del valor catastral del VICI de San Martiño «para modificarlo y actualizar un desfase del 50% en el valor de los terrenos».
