Qué son y cómo se aplican los Primeros Auxilios Psicológicos
Los primeros auxilios psicológicos o PAP sirven para acompañar y ayudar a las personas en general a enfrentarse a una situación difícil y extraordinaria, fuera de su vida diaria, a la que vamos a llamar incidente crítico
La mayoría de nosotros sabe qué son los primeros auxilios y muchos hemos aprendido a aplicarlos. En cambio, muy pocos hemos oído hablar de los primeros auxilios psicológicos (PAP). Sin embargo, por su alto valor preventivo, todas las personas deberían conocerlos y saber aplicarlos en contextos de la vida cotidiana. Hoy, Iria Fernández, del Centro de Psicología Resiliencia nos cuenta los detalles.
Los primeros auxilios psicológicos o PAP sirven para acompañar y ayudar a las personas en general a enfrentarse a una situación difícil y extraordinaria, fuera de su vida diaria, a la que vamos a llamar incidente crítico.
Son una serie de acciones, cuyo objetivo principal es reducir el impacto sobre la vida y la evolución del afectado. Tienen como objetivo prevenir la aparición de los síndromes de estrés agudo y postraumático. El fin de los PAP es, gestionar un incidente crítico de forma que se reduzca al máximo el riesgo de que la persona afectada, sufra secuelas tras lo ocurrido.
Para ser efectivos deben de aplicarse desde los momentos inmediatamente posteriores al incidente.
Qué hacer
- Contener: intentar que las emociones no se desborden, asegurar la comodidad y el descanso, y mostrar atención.
- Calmar: hablar en voz baja y suave y tratar de relajar o distraer.
- Informar: usar un lenguaje adecuado a la edad o características de la persona, explicando lo ocurrido de formar simple y honesta, tratando de responder a todas sus preguntas. Es importante que la información sea veraz.
- Normalizar: poner nombre a las emociones. Las primeras reacciones como pueden ser la tristeza, agresividad, enfado son normales en un primer momento.
- Consolar: ayudarle a entender lo ocurrido, tratar de mantener las rutinas, no obligar a hablar o a estar en sitios donde no quieran.
Cuándo aplicarlos
- IC puntual: tienen un comienzo y un final claros y transcurren en un periodo de tiempo relativamente corto (por ejemplo, un accidente, un tornado, etc.). Hay que aplicar los PAP durante al menos las 72 horas posteriores y, como máximo, durante una semana.
- IC de largo recorrido: se alargan en el tiempo (por ejemplo, un ingreso de varias semanas en la UCI). Se aplicarán durante todo el periodo de su duración y hasta al menos un mes tras finalizar el incidente.
- En las emergencias masivas, los primeros auxilios psicológicos se aplican en los centros de recepción de familiares y afectados. Es importante que estos lugares sean tranquilos y seguros.
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En los incidentes críticos cotidianos, que es un suceso traumático que afecte a una familia o a un grupo reducido de gente, como puede ser la perdida traumática de un ser querido. Los PAP suelen aplicarse allí dónde se producen las malas noticias: hospitales, consultorios, escuelas, comisarias de la policía, etc
Cuándo acudir a profesionales
Hay una serie de respuestas —sueños recurrentes; angustia al recordar; alteración de la realidad; incapacidad de recordar, etc— que son absolutamente adaptativas y suelen desparecer al cabo de unas cuatro semanas y se conocen como trastorno por estrés agudo. Consiste en una reacción disfuncional, desagradable e intensa que comienza poco después de un acontecimiento traumático o abrumador y que se prolonga durante menos de un mes.
Si se prolongaran mucho más, lo adecuado sería consultar a un profesional porque podría evolucionar a un Trastorno por estrés postraumático.