El Consello Regulador de la DO Valdeorras ha confirmado la aparición del hongo mildiu en varios viñedos de la zona de Valdeorras en un estadio muy inicial. El director técnico del ente, Jorge Mazaira, explica que «se trata de casos muy puntuales, sin motivo para alarmarse, porque de momento no se han visto manchas en exceso, nada en las hojas, sólo hemos visto racimos parcialmente afectados».
Afirma Mazaira que «el tiempo es anodino para un mes de junio y de seguir así, podría complicar las cosas porque estamos entrando en floración». Por otra parte, explica que «hace unas semanas ya se dieron las condiciones para aplicar el tratamiento a las cepas a base de sulfato y por ello ahora las plantas no se ven afectadas en gran medida». De no haber sulfatado, explica, «se habría extendido, una planta podría haberse visto afectada en un 15 ó 20% y sin embargo es solo algún racimo puntual que se ha detectado en alguna viña». Es por ello que «todo el mundo está un poco tenso, con la mochila o el transporte preparado para en cuanto pase el aguacero, volver a la viña y aplicar de nuevo el tratamiento contra el hongo».
A pesar de que explica que «los tratamientos no pueden darse hasta que deje de llover porque no valdrían ya que el agua haría que el sulfato resbalase y no permaneciese en la hoja», desde una de las bodegas afectadas, Adega Jose Aristegui de A Rúa, su responsable, Jose Luis, cuenta que las salidas a aplicar el tratamiento son continuas, en cuanto la lluvia ofrece una tregua, por corta que sea. Y es que el recuerdo del brote de mildiu de hace un par de años está presente. En aquella ocasión, relata, «los primeros síntomas fueron muy esporádicos, manchas puntuales, un racimo dañado... Un inicio silencioso que se convirtió en plaga muy rápidamente».
Para Aristegui la tranquilidad pasaría porque «escampase con una subida de temperaturas de 35 grados y calor seco, condiciones que acabarían con el hongo, algo que no se dará, porque de escampar lo hará con 25 ó 26 grados y alto grado de humedad, por lo que los tratamientos, para nosotros al menos, son imprescindibles y han de ser continuos desde el primer momento».
Imagen de portada cedida por Adega José Aristegui
