La participación de los vecinos fue muy alta a pesar de que los termómetros alcanzaron este fin de semana hasta 32 grados de máxima en la comarca
El tremendo calor que registraron los termómetros de la comarca de Valdeorras este pasado fin de semana, no empañó, sin embargo, la celebración de la Feira de 1812 de Petín que abría sus puertas el sábado y las cerraba ayer domingo. En su preámbulo, la I Cena Popular del viernes día 31 de mayo, ya podía adivinarse la entrega de los vecinos a la iniciativa, dada la asistencia conseguida en esta primera edición del convite; un total de 190 entradas vendidas «e porque non había máis», en palabras de la presidenta de Asociación Fonte Grande, organizadora del evento.
La larga mesa se colocaba a lo largo de la calle Carreira, en pleno casco histórico de la villa, y en ella se servía desde empanada de carne, entremeses variados, hasta el plato fuerte, redondo de ternera guisado. Todo ello regado con buen vino de la tierra, café y licores varios. La taberna de la asociación se encargó de hacer el resto una vez terminada la comilona. Muchos fueron los vecinos de poblaciones aledañas que también quisieron participar de la fiesta.
Al día siguiente, tocó abrir las puertas de la octava edición de la Feira de 1812 de Petín. Los gaiteiros anunciaban su puesta en marcha y Luis Posse Vidal se encargaba del pregón justo antes de comer, presentado por Juan José Rodríguez Losada «Chavito». Volvía el calor, hasta 32 grados se registraron en la jornada del sábado, lo que no impedía abrir los puestos, e incluso cocinar el churrasco en la taberna. Eso sí, muchos desistían finalmente de enfundarse en el traje de época.
El discurso de Luis Posse, muy entrañable, muchas anécdotas de infancia, muchos nombres de personajes ilustres de Petín. Y mucha historia, con mención especial a la estancia de las tropas francesas en Petín durante la Guerra de la Independencia, y al coraje de las mujeres cuando se enfrentaron al enemigo.
A pesar de que problemas administrativos no permitieron el contrato y participación de las tropas francesas y sus pólvoras como en años anteriores, la Feria de 1812 de Petín aglutinó a expositores artesanos, el museo de la cerveza, teatro en la calle a cargo de A Ruada, churrasco a precios accesibles en la taberna de la organización, música y muy buen ambiente.