Una veintena de puestos agroalimentarios y cuatro pulpeiros se dieron cita este sábado para retomar la actividad
Había ganas de feria en O Barco. En la mañana de este sábado, 6 de junio, los puestos volvían a ocupar la Plaza Otero Predayo de Viloira por primera vez desde que se decretó el Estado de Alarma. No faltaron los clientes ni tampoco uno de sus principales protagonistas, el pulpo.
Una veintena de puestos se colocaron dentro del nuevo plano marcado por el concello y respetando las distancias de seguridad de cuatro metros entre cada carpa. Eso sí, solo estaban permitidos los que venden productos agroalimentarios, como los de ajos y frutos secos, bacalao, embutidos, encurtidos, pastas, pan, queso... Y las pulpeiras, cuatro en total. Aunque eso sí, a diferencia que antes, ahora la gente prefiere llevarselo a casa.
Una jornada tranquila y marcada por el respeto de las medidas de seguridad que marca la crisis sanitaria.